Este sería el 50% del total de unidades producidas en los últimos 15 años.
Bentley alcanzó un hito de producción este año. Crewe ha elaborado su Flying Spur número 40.000 desde el resurgimiento de la placa de identificación en el año 2005. Si bien el lujoso auto nació con un nombre diferente, llamado inicialmente Continental Flying Spur, Bentley ha mantenido sus rasgos definitorios como insignia.
El anuncio de este hito llegó con una versión color verde del Flying Spur salida de Crewe, la unidad número 40 mil de la fábrica.
Según Bentley, cada sedán a medida necesitó más de 100 horas para construirse de la mano de una mano de obra calificada compuesta por diseñadores, ingenieros y artesanos. La producción es de 250 personas, ensamblando el modelo completamente a mano.
Después del proceso, el automóvil pasa por cientos de pruebas de calidad. Luego se envía a uno de los 68 países donde opera Bentley.
De las 40 mil unidades que se han producido, el 50% se envió a Estados Unidos y China, los mercados más grandes de la marca británica. La otra mitad se entregó a otras partes del mundo: 40% a Europa, Medio Oriente y Asia Pacífico, mientras que el 10% se quedó en el Reino Unido.
La historia del auto se remonta al año 1959, como una versión especial del Bentley S2, pero no fue hasta 2005 cuando Bentley revolvió el nombre como una versión completa de cuatro puertas del Continental GT. En 2013, Bentley eliminó Continental de su nombre, avanzando como una línea de modelos propia, y ahora como nuevo modelo insignia del fabricante de automóviles.
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El Bentley Flying Spur se encuentra ahora en su modelo de tercera generación, construido desde cero, representando la última artesanía británica.
Redacción de GossipVehículo y fuente: Motor 1
