En 2017, Hyundai y Kia retiraron 1,5 millones de vehículos del mercado de Estados Unidos, Canadá y Corea del Sur.
El motivo del retiro fue errores de mecanizado durante la fabricación del vehículo que podrían causar «desgaste prematuro de los cojinetes dentro del motor», como señaló la Administración Nacional de Seguridad en las Carreteras. Los vehículos afectados fueron cientos de Hyundai Sonata 2011-2014 y Santa Fe Sport 2013-2014, junto con otros modelos Kia. La empresa tuvo que reemplazar los motores de forma gratuita.
Esta campaña de servicio concluyó, según anunció Hyundai en un comunicado de prensa. Como parte del acuerdo, la marca coreana pagará una multa en efectivo de USD $54 millones, y realizar inversiones de USD $40 millones para mejorar sus operaciones de seguridad. Hyundai también estará sujeto a un posible pago diferido de USD $46 millones, dependiendo del cumplimiento de la compañía con una Orden de Consentimiento de la NHTSA.
Esa inversión de USD $40 millones debería incluir la construcción de un laboratorio de inspección y prueba de campo de seguridad en Estados Unidos, así como la implementación de nuevos sistemas de TI para mejor análisis de datos de seguridad e identificación de posibles problemas de seguridad.
VER MÁS – Volkswagen descontinuará al Passat Sedan en Europa
«La seguridad del cliente es nuestra máxima prioridad y estamos tomando medidas inmediatas para mejorar nuestra respuesta a posibles problemas de seguridad», dijo Brian Latouf, director de seguridad de Hyundai Motor North America.
«Valoramos una relación de colaboración y cooperación con el Departamento de Transporte de Estados Unidos y la NHTSA, y continuaremos trabajando en estrecha colaboración con la agencia para identificar y abordar de manera proactiva posibles problemas de seguridad. Estamos comprometidos con la mejor oficina de seguridad de Estados Unidos en su clase».
Redacción de GossipVehículo y fuente: Motor 1
