Tuvo que pasar 12 horas bajo cero.
El LC es uno de los autos más geniales del mundo. Ahora, Lexus lo llevó a una intensa prueba de calidad para la versión de capota blanda. El cabrio tuvo que pasar 12 horas en la Gran Cámara Climática en Millbrook Proving Ground en Bedforshire a 18 °C.
Lexus bajó el techo de tela para exponer completamente el interior del LC a las temperaturas de la cámara de refrigeración de grado industrial, que es lo suficientemente grande para un par de autobuses de dos pisos. Antes de colocar el convertible en el congelador, Lexus roció el automóvil con agua para que se formara una capa de hielo sobre la carrocería.
El resultado final llevó las cosas a un nivel completamente nuevo, comparado con el trabajo de pintura Frozen Berry de Porsche, o los acabados mate Frozen de BMW. Esto es porque el Lexus estaba repleto de hielo en toda su carrocería. El conductor de acrobacias profesional, Paul Swift, tuvo la tarea de sacar el convertible a dar una vuelta, y el auto funcionó a la perfección.
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Desde su motor V8 de aspiración natural de 457 caballos de fuerza hasta los asientos con calefacción, el Lexus LC no mostró «ningún impacto adverso del frío extremo».
Un cortometraje llamado «Frozen» muestra al LC Convertible descansando a temperaturas muy por debajo de cero antes de salir a la carretera sin ningún problema técnico. Paul Swift lo condujo por el curso de la colina de Millbrook y se puede ver cómo el hielo se derrite después de que el automóvil se vuelve a familiarizar con las temperaturas normales.
Redacción de GossipVehículo y fuente: Motor 1
