Cualquier apasionado por los autos sueña con conducir un superdeportivo de la talla del Ferrari SF90 Stradale, un híbrido enchufable que es capaz de alcanzar los 1.000 HP y su estética lo coloca como uno de los Cavallinos Rampantes más atractivos del momento.
Sin embargo, el sueño puede convertirse rápidamente en una pesadilla si se sufre un accidente importante con este auto, tal y como le ha sucedido al propietario de la esta unidad.
Directo al desguace
El ejemplar que se muestra en las imágenes se vio implicado en un accidente cuyas causas son un misterio. El resultado final es muy doloroso, sobre todo, para el propietario, ya que la reparación del superdeportivo podría costar cerca de un millón de dólares.
En general, el vehículo quedó bastante afectado, sobre todo, en la parte delantera ya que el parachoques, los grupos ópticos, el capó y los sistemas eléctricos sufrieron daños considerables.
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Asimismo, los daños se extienden a los laterales e incluso la parta trasera, aunque este última zona en menor medida.
En el interior tampoco ha salido ileso ya que los airbags están desplegados, el parabrisas destrozado y los pedales ya no están. Lo único que podría salvarse es el sistema de propulsión híbrido enchufable.
Lo peor del caso es que este Ferrari SF90 Stradale apenas había sido conducido por las carreteras de California 180 millas, es decir, 290 kilómetros.
Redacción Gossip Vehículos Fuente: CarAndDriver
