El exclusivo Ferrari F8 Tributo se ha marchado del mercado por la puerta trasera tras solo tres años en la línea de producción. Esto también incluye a la variante descapotable del F8 Spider que se presentó un año después y que solo sumó dos años de ventas.
La firma italiana solo se encarga de fabricar las unidades solicitadas por sus clientes antes del cierre de libros de pedidos en todo el mundo. Una decisión que convertirá al modelo en uno de los más codiciados por su corto recorrido. Ahora bien, la decisión esconde un doble trasfondo.
Ferrari comienza a notar las presiones que significa que los límites de emisiones de C02 en Europa.
El nuevo Ferrari 296 GTB es uno de los motivos del cese de producción de los F8
Esta es una de las razones por la que el modelo con motor V8 de 3,9 litros biturbo con una potencia de 710 CV, ha dejado el mercado, ya que el propulsor no dispone de electrificación.
Los F8 Tributo y F8 Spider se han convertido en un objetivo para los clientes más pudientes, seguido del Ferrari Roma y el SF90 Stradale. Con la salida de este modelo, se podrá priorizar la producción y entregas del nuevo Ferrari 296 GTB.
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La firma busca alcanzar un doble objetivo, reducir considerablemente las emisiones de la gama y potenciar las ventas del 296 GTB, que además estrenará una versión Spider con un rendimiento de 830 HP. Todo esto sin cortar el estreno estrella del Ferrari Purosangue.
Redacción Gossip Vehículos Fuente: Motor.es
