Ford concretó un retiro masivo de más de 700.000 automóviles que representan una parte importante de su línea. Estos retiros han sido emitidos debido a que existen riesgos de incendio y problemas con el módulo de frenos del remolque. Se han informado de varios incidentes al Blue Oval en los últimos meses, sin lesiones ni accidentes de esa naturaleza.
Para ser más específicos, la NHTSA Recall No. 22V-191, incluye la cantidad de 345,451 unidades de Ford Escape y Ford Escape, pero no se reveló la cifra exacta de unidades para cada automóvil. Es preciso acotar que, las Ford Escape 2020-2022 fabricadas entre el 19 de noviembre de 2018 y el 1 de marzo de 2022 se ven afectadas, mientras que las Ford Bronco Sport 2021-222 fabricadas entre el 5 de febrero de 2020 y el 4 de marzo de 2022 también se incluyen en el retiro.
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Todas las unidades Ford Escape y Bronco Sport incluidas, llevan un motor de 1.5 litros. De acuerdo con los documentos de la NHTSA, el fallo está en la carcasa del separador de aceite del motor, que podría agrietarse y desarrollar una fuga de aceite, misma que podrían acumularse y formar una fuente de ignición, lo que aumenta significativamente el riesgo de incendio.
Por otro lado, NHTSA Recall No. 22V-193, involucra 391,836 ejemplares de Ford F-150, Maverick, Expedition, Super Duty y Lincoln Navigator por un software de controlador de freno de remolque con fallos. Según la descripción de este fallo, «es posible que el controlador de los frenos del remolque no aplique correctamente los frenos del remolque cuando éste esté equipado con un sistema de frenos eléctrico o eléctrico-hidráulico».
Por último, se exhorta a los concesionarios Ford y Lincoln para que revisen y de ser necesario, reemplacen los separadores de aceite y los sellos. Mientras, se actualizará el software del módulo de control de freno de remolque integrado.
Redacción por Gossip Vehículo y fuente motor1.
