Nissan es una marca reconocida mundialmente por su innovación y pasión por los automóviles deportivos. A lo largo de los años, ha producido una impresionante variedad de vehículos que han dejado una marca indeleble en la industria automotriz y han cautivado a los entusiastas de los deportivos en todo el mundo. Desde los icónicos modelos Z hasta los potentes GT-R, Nissan ha demostrado una y otra vez su habilidad para combinar rendimiento, estilo y emoción en cada uno de sus automóviles deportivos.
Por todo lo dicho anteriormente vamos a conocer los 15 mejores Nissan deportivos de todos los tiempos. Desde los clásicos modelos que sentaron las bases de la reputación deportiva de la marca hasta las creaciones más recientes que han llevado la tecnología y el rendimiento a nuevos límites, cada automóvil seleccionado en esta lista es un testimonio del compromiso de Nissan con la excelencia en el mundo de los deportivos.
Los 15 mejores Nissan deportivos de todos los tiempos
Clasificar los mejores autos deportivos Nissan de todos los tiempos puede ser una tarea subjetiva, ya que las preferencias pueden variar según los gustos personales. No obstante, aquí te presentamos una lista de 15 destacados autos deportivos Nissan que han ganado reconocimiento a lo largo de los años:
15. Nissan Micra superturbo
El Nissan Micra es un auto subcompacto que ha estado en el mercado por mucho tiempo. En 1989, Nissan sorprendió a todos al lanzar el Micra Superturbo. Este modelo recibió un motor de cuatro cilindros y 0.9 litros con un turbocompresor, lo que le dio un impulso adicional de potencia.
El Micra Superturbo era un automóvil de doble carga, lo que significa que lograba producir 108 caballos de fuerza. Estaba equipado con una transmisión manual de cinco velocidades y un diferencial de deslizamiento limitado en la parte delantera. A pesar de pesar alrededor de 1,500 libras, era un vehículo realmente maravilloso para conducir.
Aunque el Micra no se vende en los Estados Unidos, todavía está disponible en Canadá. De hecho, Nissan organiza actualmente una serie de carreras llamada Copa Micra en Canadá. Esto demuestra que un automóvil económico y liviano, aunque no tenga una gran potencia, puede ser extremadamente divertido de manejar.
14. Datsun Sports
Antes de que los icónicos autos Nissan/Datsun Z se hicieran famosos, existían los modelos deportivos conocidos como «Sports» (llamados «Fairlady» en Japón). Durante la década de 1960, esta serie de roadsters capturaron la atención. Todo comenzó con el Sports 1000, equipado con un motor de cuatro cilindros y 1.0 litros que generaba 38 hp. A este le siguieron el Sports 1200, el Sports 1500, el Sports 1600 y, finalmente, el Sports 2000.
Cuando llegamos al modelo Sports 2000, la potencia se había incrementado a 133 hp gracias a un motor de cuatro cilindros y 2.0 litros, era bastante impresionante para un vehículo de tan solo 2,000 libras de peso.
13. Nissan Silvia 240RS
En el año 1983, Nissan buscaba un nuevo automóvil para competir en carreras de rally, por lo que decidieron utilizar como base el S110 Silvia (conocido como 200SX en Estados Unidos). Con el objetivo de mejorar su rendimiento, se amplió la carrocería, se realizaron mejoras en la mecánica y se introdujo una versión especial del motor FJ de cuatro cilindros, con una capacidad de 2.4 litros. El resultado fue el Nissan 240RS, un vehículo que entregaba impresionantes 237 hp y 173 lb-pie de torque.
Aunque el Nissan 240RS obtuvo cierto éxito en las competencias de rally a nivel mundial, no logró alcanzar el potencial que Nissan tenía en mente. A pesar de sus mejoras y desempeño en pista, el 240RS no alcanzó las expectativas que la compañía había depositado en él.
12. Nissan Pulsar GTI-R
El Nissan Pulsar GTI-R, fabricado entre 1990 y 1994, fue otro automóvil creado para cumplir con los requisitos de homologación del Campeonato Mundial de Rally. Este vehículo destacaba por su tracción integral y su motor turboalimentado de cuatro cilindros y 2.0 litros, capaz de generar 227 hp y 210 libras-pie de torque.
El Nissan Pulsar GTI-R se destacaba de los modelos Pulsar estándar debido a su llamativo alerón, una toma de aire en el capó y un trabajo aerodinámico en la parte inferior de la carrocería. A pesar de ser más pesado que los otros modelos GTI-R, con alrededor de 600 libras adicionales, su peso total de 2,690 libras seguía siendo relativamente liviano considerando la potencia que ofrecía. Estos elementos distintivos y el equilibrio entre potencia y peso convirtieron al Nissan Pulsar GTI-R en un vehículo excepcional en su tiempo.
11. Nissan Silvia NISMO 270R
Nissan 270R era un modelo especial único basado en la plataforma del Silvia. Sin embargo, a diferencia del 240RS, el propósito del 270R no era competir en rally, sino dominar la pista. Este vehículo, lanzado en 1994, se basaba en el S14 Silvia, conocido como 240SX en Estados Unidos, y fue creado por el renombrado brazo de ajuste de Nissan, NISMO.
El Nissan 270R se destacaba por su impresionante potencia generada por un motor turboalimentado de 2.0 litros, lo que le valió su nombre «270» en referencia a los caballos de fuerza que producía. Esta potencia mejorada era significativamente mayor que la de los Silvias convencionales. Además de esta mejora en el rendimiento, 270R contaba con otras mejoras, como un kit aerodinámico y un diferencial de deslizamiento limitado de dos vías en la parte trasera. El vehículo fue un testimonio del enfoque de NISMO en la optimización de los vehículos de Nissan para obtener el máximo rendimiento.
10. Nissan 350Z/370Z
Tras un breve descanso, Nissan Z, un automóvil emblemático, hizo su regreso triunfal en 2002 con el lanzamiento del 350Z. Este deportivo de dos asientos estaba equipado con un potente motor V6 de 3.5 litros que generaba 287 caballos de fuerza, y su diseño era una combinación de elegancia y modernidad para su época. Con el tiempo, el 350Z evolucionó y, para 2008, su potencia aumentó a 306 caballos de fuerza, colocándolo a la par de su competencia en ese momento.
En 2009, llegó la siguiente generación de los modernos autos Z, conocida como el 370Z. El número 370 hacía referencia al aumento en la cilindrada del motor V6, que ahora alcanzaba los 3.7 litros. Esta nueva versión ofrecía una potencia de hasta 332 caballos de fuerza, y lo interesante es que el 370Z era en realidad más compacto y liviano que su predecesor, el 350Z.
9. Nissan Silvia Spec R Aero
La versión final del Nissan Silvia, también conocido como 240SX, recibió una edición especial de alta gama llamada Spec-R. Aunque compartía el mismo motor turboalimentado de cuatro cilindros y 2.0 litros con otras versiones del Silvia, con una potencia de 250 caballos de fuerza, se realizaron numerosos cambios y mejoras en otros componentes.
La estructura de la carrocería y el chasis se reforzaron para garantizar una mayor rigidez y una respuesta más precisa en la conducción. Además, se sustituyó la transmisión manual de cinco velocidades por una transmisión manual de seis velocidades. Los frenos se mejoraron para ofrecer un rendimiento de frenado más efectivo y confiable.
Una característica destacada de la versión Spec-R era la disponibilidad de dirección en las cuatro ruedas, mejorando la agilidad y la estabilidad en las curvas. Además, ofrecía un paquete Aero opcional que incluía un llamativo alerón trasero de dimensiones generosas, añadiendo un toque visual audaz y aerodinámico al Silvia Spec-R.
8. Nissan Juke-R
El crossover extravagante Nissan Juke se transformó en un asesino de superdeportivos al instalarle la mecánica del GT-R. El Juke-R contaba con un motor V6 turboalimentado de 3.8 litros y 545 caballos de fuerza que impulsaba las cuatro ruedas a través de una transmisión de doble embrague, convirtiéndolo en un concepto de automóvil audaz que se hizo realidad.
En 2015, Nissan presentó el Juke-R 2.0, equipado con la potente mecánica del GT-R NISMO que generaba 600 caballos de fuerza y 481 lb-pie de torque. Esto permitía que el crossover subcompacto acelerara de 0 a 60 mph en tan solo 3.7 segundos, superando a muchos superdeportivos en el proceso. Nissan llevó la personalidad excéntrica del Juke a otro nivel al dotarlo de una potencia digna de los automóviles de alto rendimiento más destacados.
7. Nissan Skyline 2000GT-R 1969-1973
Los legendarios Skyline GT-R originales son los automóviles que dieron inicio a todo. Estos modelos sentaron las bases para décadas de increíbles autos deportivos fabricados por Nissan, convirtiendo a la línea Skyline y al GT-R en verdaderos íconos del mundo automotriz.
En 1969, el Skyline GT-R hizo su debut con un motor de seis cilindros y 2.0 litros que ofrecía 160 caballos de fuerza, junto con una transmisión manual de cinco velocidades.
En 1973, llegó la segunda generación del Skyline GT-R, nuevamente impulsada por el mismo motor de seis cilindros y 2.0 litros. Su producción duró solo un año antes de ser descontinuada. A pesar de su corta existencia, este modelo dejó una huella imborrable en la historia de los deportivos.
Estos primeros Skyline GT-R marcaron el comienzo de una legendaria saga que ha perdurado a lo largo del tiempo. Su impresionante rendimiento, combinado con su distintiva estética, estableció una reputación que continúa hasta el día de hoy.
6. Nissan 280ZX/300ZX Turbo
Los vehículos Nissan ZX marcaron una nueva era después de los icónicos modelos Z en 1978. El primer modelo en debutar fue el 280ZX, equipado con un motor de seis cilindros y 2.8 litros que entregaba 145 caballos de fuerza. En 1981, se introdujo una opción de turbocompresor que elevó la potencia a impresionantes 180 CV.
En 1983, llegó la segunda generación del ZX, ofreciendo un motor V6 de 3.0 litros en versiones aspiradas y turboalimentadas. Hacia el final de la producción de este modelo, el motor turbo generaba entre 200 y 227 caballos de fuerza, dependiendo del mercado y las especificaciones.
En 1989, se presentó el último modelo de la serie, el 300ZX. Disponible en configuración de dos asientos o 2+2, este vehículo destacaba con un potente motor V6 de 3.0 litros con turbocompresor, capaz de generar 300 caballos de fuerza.
5. Nissan Stagea Autech 260RS
El Stagea Autech 260RS fue la combinación perfecta entre la potencia del legendario Skyline GT-R y la practicidad de un automóvil familiar. Con un motor turboalimentado de seis cilindros y 2.6 litros capaz de generar 276 caballos de fuerza, este «super-wagon» ofrecía una experiencia de conducción emocionante y deportiva, sin comprometer la practicidad y el espacio que se espera de un familiar. El Stagea Autech 260RS representaba un equilibrio ideal entre rendimiento y versatilidad.
4. Nissan 240Z/260Z/280Z
Los automóviles Z de Nissan han alcanzado un estatus icónico que pocos deportivos han logrado igualar. Cuando el 240Z hizo su aparición en 1970 (conocido como Fairlady Z en Japón), de inmediato fue aclamado como el «Jaguar de los menos afortunados», gracias a su estilo similar al de este prestigioso automóvil británico.
Impulsado por un motor de seis cilindros y 2.4 litros, el Z original tenía un peso ligeramente superior a las 2,300 libras y ofrecía 151 hp de potencia. En 1974, el motor fue aumentado a 2.6 litros, dando lugar al nombre 260Z. Tan solo un año después, llegó el 280Z con un motor aún más grande. Aunque el peso del vehículo había aumentado, su potencia alcanzaba los 170 hp.
Hasta el día de hoy, muchos consideran que estos primeros modelos Z son algunos de los deportivos más atractivos jamás fabricados. Los autos Z de Nissan capturaron la esencia de la elegancia y la potencia, y continúan siendo admirados y buscados por entusiastas de todo el mundo.
3. Nissan GT-R
Tras la discontinuación del legendario Skyline GT-R, Nissan se propuso llenar el vacío en la cima de su jerarquía de rendimiento. Así nació el impresionante GT-R, un automóvil deportivo diseñado con seriedad y enfocado en ofrecer un rendimiento excepcional. Impulsado por un motor V6 turboalimentado de 3.8 litros, el GT-R ha ganado una reputación formidable al derrotar a competidores más potentes y considerablemente más costosos.
En su lanzamiento en 2008, el GT-R generaba 478 hp, pero en la asombrosa versión NISMO, hoy puede superar los 600 hp. Sin embargo, la potencia es solo una parte del sorprendente desempeño del GT-R. Su transmisión de doble embrague y su avanzado sistema de tracción total garantizan que las vueltas en la pista se completen a una velocidad vertiginosa.
El GT-R no solo es un símbolo de poder y velocidad, sino que también es un maestro en términos de ingeniería y tecnología. Su carrocería aerodinámica y su sistema de suspensión ajustable permiten una conducción precisa y ágil, brindando una experiencia de manejo excepcionalmente emocionante.
2. Nissan Skyline GT-R R32-R34
Los legendarios R32, R33 y R34 Skyline GT-R sentaron las bases para el icónico GT-R moderno que conocemos hoy en día. Estos tres códigos representan las diferentes generaciones de Skyline GT-R que cautivaron a los entusiastas desde 1989 hasta 2002. Partiendo de la plataforma del cupé y sedán Skyline, estos discretos autos de tracción integral lograron superar a numerosas máquinas impresionantes tanto en calles como en pistas.
Con la excepción de algunos modelos especiales como el 400R, todas las variantes del Skyline GT-R estaban equipadas con un motor de seis cilindros y 2.6 litros con turbocompresor. Aunque se autolimitaban a 276 caballos de fuerza, una cifra que se volvió legendaria, el GT-R subestimado continuó evolucionando su torque a lo largo de sus 14 años de producción, lo que sugiere que su potencia real también estaba aumentando de manera significativa.
Estos Skyline GT-R no solo se destacaron por su rendimiento deslumbrante, sino también por su excepcional agilidad y maniobrabilidad. Gracias a su avanzado sistema de tracción total y a la meticulosa ingeniería japonesa, estos autos demostraron ser dominantes en las curvas y en situaciones de alta velocidad. Hasta el día de hoy, los R32, R33 y R34 Skyline GT-R son reverenciados como verdaderos íconos del mundo de los automóviles deportivos.
1. Nissan R390 GT1
A mediados de la década de 1990, para competir en el más alto nivel de las 24 horas de Le Mans, los fabricantes tuvieron que basar sus autos de carrera en vehículos de carretera.
El Nissan R390 GT1, con su motor V8 de 3.5 litros acoplado a una transmisión secuencial de seis velocidades que enviaba potencia a las ruedas traseras, parecía un prototipo de Le Mans diseñado para las calles. De hecho, solo se fabricaron dos unidades de este automóvil, y uno de ellos está en manos de un afortunado propietario privado.
Con una velocidad máxima de 220 mph y la capacidad de completar el cuarto de milla en poco más de 11 segundos, el R390 GT1 se destacó como uno de los automóviles más rápidos de su época. Su diseño aerodinámico y su avanzada tecnología lo convirtieron en una máquina impresionante tanto en la pista como en la carretera.
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Redacción Gossipvehículo
