Durante aproximadamente diez años, si el presupuesto no te permitía adquirir una Honda CR-V o una Toyota RAV4, la solución inmediata para tener una camioneta (SUV) era clara: «Adquiere una Trax».
La Chevrolet Trax arrasó en el mercado mexicano. Su precio era muy competitivo, ofrecía la altura ideal para sortear los baches de la ciudad, portaba el confiable emblema de Chevrolet y se estacionaba sin problemas en cualquier sitio. Sus ventas fueron masivas y, como resultado, hoy son un modelo omnipresente en el mercado de vehículos usados.
Sin embargo, existe un conocimiento compartido entre los expertos automotrices: La Trax utiliza el mismo motor (y, por ende, padece los mismos defectos crónicos) que otros modelos de la marca, como el Chevrolet Sonic y el Cruze.
Si posees este vehículo o estás considerando comprar uno, es fundamental que sepas que su sistema de refrigeración es su punto más vulnerable. A continuación, te detallamos los puntos clave a inspeccionar para evitar que tu camioneta sufra una avería y necesite ser remolcada.
Contenido Verificado por Expertos
Volvemos a recurrir al conocimiento de Jorge Soto. Dado que este vehículo pertenece al grupo General Motors (GM), Jorge ha intervenido cientos de veces estos propulsores Ecotec y conoce a la perfección cuáles son los componentes de plástico que suelen ceder primero.
Las 5 Fallas Comunes de la Chevrolet Trax

1. El Depósito de Anticongelante (Se rompe solo)
Esta es la falla número uno, la que les pasa a casi todas las Trax.
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La Señal Clave: Llegas a tu casa, la apagas, y de repente, escuchas un «psssst» o un gorgoteo suave bajo el capó. Cuando revisas, notas que el nivel de ese líquido rosa/naranja (el anticongelante) está más bajo de lo normal o que hay manchas blanquecinas y secas pegadas al costado del depósito.
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¿Por Qué Sucede? El plástico del tanque de reserva simplemente no aguanta el constante y alto calor del motor. Se termina «cociendo», creando fisuras minúsculas (como cabellos) por donde la presión del sistema se va escapando poco a poco.
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El Remedio: Tienes que cambiar el depósito completo y también el tapón. La buena noticia es que es una pieza barata. La mala es que, si te haces el despistado y no lo cambias, el motor se va a calentar tanto que despedirás a la junta de la cabeza (lo que es una reparación muy, muy costosa).
2. La Toma de Agua y el Termostato
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El Aviso: Notas que el ventilador se queda prendido más tiempo de lo normal, como si le costara enfriarse. O, peor aún, en el tráfico lento, la aguja de la temperatura se va más allá de la mitad del medidor.
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¿Qué está fallando? El problema es la caja del termostato. Es igual que la del Sonic: está hecha de plástico y, con los años y el calentamiento, se tuerce y empieza a gotear anticongelante.
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El Consejo de Oro de Jorge: «Ni se te ocurra comprar esa refacción china de $300 pesos en la esquina. Tienes que invertir en la pieza original de GM o buscar marcas de calidad garantizada como AC Delco o Gates. Las versiones baratas te van a durar dos meses y tendrás que repetir el gasto.»
3. Bobinas de Encendido (El «Temblor»)
- ¡Ojo si te pasa en el alto! Estás parado con la palanca en «D» y notas que la Trax está temblando o dando tironcitos muy raros. Cuando por fin aceleras para avanzar, se siente lentísima, como si le faltara el aire, y para rematar, el «Check Engine» empieza a prender y apagar sin parar, como una alerta grave.
- La razón detrás del susto es sencilla: El Módulo de Bobinas (esa pieza larga que le da la chispa a los cuatro cilindros) está fallando. Lo que pasa es que los contactos internos se oxidan o se llenan de suciedad, impidiendo que la energía llegue bien al motor.
- ¿Qué toca hacer? Es necesario que le reemplaces ese módulo de bobina completo y, de paso, aproveches para ponerle bujías nuevas. ¡Con ese cambio, la camioneta volverá a tener toda su potencia!
4. Fugas de Aceite (Enfriador)
- La Prueba: Encuentras manchas de aceite en el suelo o sientes un fuerte olor a aceite quemado que sale del motor caliente.
- El problema: Lo que pasa es que los empaques del enfriador de aceite (esa pieza que vive justo detrás del escape) se cocinan con el calor y empiezan a dejar escapar el líquido. ¡Mucho ojo! En casos extremos, el aceite se pasa al sistema de enfriamiento y verás una mezcla pastosa, color café con leche, en el depósito del anticongelante.
- La Solución: Este no es un arreglo simple. Es una reparación laboriosa porque hay que desmontar la parte del escape para llegar a la pieza. Por eso, necesitas llevar tu Trax con un mecánico que realmente sepa lo que hace.
5. Manijas Interiores Rotas
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Ese Pequeño Trauma: Estás listo para bajarte de la camioneta y ¡pum! la manija cromada se siente aguada, casi te la quedas en la mano o simplemente no acciona la puerta. Es un fastidio, pero pasa.
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¿Por qué se Deshacen? Es sencillo: son de plástico pintado de cromo, y con el uso diario o si las jalas con fuerza, el mecanismo de adentro se fatiga y truena.
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La Paz Mental: Por suerte, son baratísimas y cualquiera las cambia, pero te aviso: si usas mucho esa puerta, es una escena que vas a repetir de vez en cuando.
🛠 El Veredicto del Mecánico
«Mira, la Trax no es una mala camioneta, para nada,» nos asegura Jorge Soto. «Pero tienes que entender que es un vehículo que exige un dueño muy metido. No puedes tratarla como si fuera una Toyota, a la que solo le pones gasolina y te olvidas de ella.»
«Su punto débil, te lo repito, son todos los componentes de plástico del sistema de enfriamiento. Si tú te acostumbras a revisar el nivel del anticongelante una vez a la semana y cambias preventivamente esas piezas (el depósito, el termostato, y mangueras clave) cada tres o cuatro años, vas a tener un carro muy fiel y económico. Pero si eres de los que espera a que se rompa para ir al taller, te va a dejar varado.»
Especialista en General Motors
Guía de compra rápida

Si estás pensando en ir a ver una Trax seminueva, tienes que hacerle estas tres pruebas clave:
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El Truco del Olfato: Después de manejarla por unos diez minutos, bájate y acércate a la parrilla delantera. Si detectas un olor «dulzón» (a anticongelante vaporizado) o un claro olor a aceite quemado, significa que tiene fugas activas en ese momento.
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Inspección del Tanque: Mira bien el depósito del líquido refrigerante. Lo ideal es que se vea limpio y transparente. Si lo ves de color negro, café o con una especie de costra pegada, ese sistema de enfriamiento está descuidado y te dará dolores de cabeza.
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Sentir la Transmisión: Si es la versión automática, los cambios de velocidad deben sentirse suaves, casi invisibles. Si notas un «golpe» o tirón cuando reduces la velocidad, ten cuidado, porque las cajas automáticas de GM de esa generación también sufren si el dueño anterior nunca les cambió el aceite.
Conclusión
La Chevrolet Trax (modelos 2013-2020) es la campeona de lo práctico: es accesible de comprar, los repuestos se consiguen en cualquier esquina (es barata de mantener) y es súper funcional.
Es una magnífica opción si buscas tu primera camioneta, siempre y cuando tengas claro que vas a tener que ir al taller de vez en cuando a cambiarle esas piezas de plástico. No es un tanque de guerra, pero es un vehículo muy fácil de tomarle cariño (y también de reparar).
Redacción por Gossipvehículos






































