Existen algunos autos que dependen de un regulador de presión de gasolina para proporcionar la presión de combustible necesaria al motor. Y claro, como cualquier pieza de auto, el regulador de gasolina podría presentar fallas eventualmente, y cuando lo hace, es probable que encuentre uno o más síntomas que lo evidencien. Si presiente que su auto puede estar teniendo problemas con esta pieza, a continuación le presentaremos las fallas y síntomas más comunes que puede presentar un regulador de gasolina defectuoso, así que manténgase atento.
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¿Qué hace un regulador de presión de gasolina?
Un regulador de presión de gasolina hace lo que indica su nombre: regular la presión del combustible que se dirige a los inyectores de combustible.
En vehículos más antiguos con un sistema de combustible continuo, el regulador suele ser un dispositivo controlado por vacío instalado en el lado de retorno del riel de combustible. El regulador dirige el exceso de combustible de regreso al tanque de gasolina para mantener la presión del combustible. Una línea de vacío conecta el regulador a una fuente de vacío del motor, lo que permite que el regulador varíe la presión del combustible de acuerdo con la carga del motor.
Se debe tener en cuenta que no todos los vehículos cuentan con un regulador de presión de combustible externo, ya que la mayoría de los vehículos modernos cuentan con un sistema de combustible sin retorno. Por el contrario, la mayoría de los sistemas sin retorno usan un módulo de control para administrar la velocidad de la bomba de combustible, manteniendo la presión de combustible deseada. También existen algunos diseños que emplean un regulador de presión en el tanque integrado en la bomba de combustible.
Fallas más comunes del regulador de gasolina
Un regulador de presión de gasolina operado por vacío puede fallar por diversas razones diferentes, no obstante, te explicaremos las tres fallas más comunes, las cuales son:
1. Exceso de gasolina en el múltiple de admisión. El regulador empieza a fugar gasolina y esta pasa por la manguera de vacío. Esto pasa cuando el regulador de presión interno se daña y esa gasolina termina en los cilindros. Tal escenario da usualmente como resultado un motor que funciona con bastante combustible (da como resultado mezclas ricas).
2. El regulador de gasolina se queda sellado. Es decir, que se queda atascado y no libera presión, en cambio, bloquea la línea de retorno y por consecuencia se tiene una alta presión de gasolina en el riel de inyectores. Esto ocurra sobre todo en marcha mínima o baja velocidad.
3. El regulador no retiene presión o deja pasar demasiada presión a la línea de retorno. El resorte pierde fuerza por lo que el regulador no puede retenerla y se escapa, regresando demasiada gasolina al tanque, dando como resultado un motor que funciona pobremente, es decir, con muy poco combustible.
Síntomas de un regulador de presión de gasolina defectuoso
Con el tiempo, un regulador de presión operado por vacío puede fallar, y eso da como resultado uno o más síntomas evidentes. Los síntomas más comunes de un regulador de presión de gasolina defectuoso incluyen:
1. Problemas de rendimiento del motor
Un regulador de presión de combustible defectuoso puede causar una pérdida de presión de combustible. A consecuencia, el motor presentaría problemas de rendimiento, como dificultad para arrancar, funcionamiento brusco, calado y falta de potencia. Puede que tengas que accionar el sistema de arranque varias veces para conseguir que el motor se ponga en marcha. El motor puede saltar o tener una marcha irregular en ralentí. Además, puede perder potencia cuando acciones el pedal del acelerador.
2. Luz de control del motor iluminada
La computadora del motor de su automóvil busca problemas, incluidos problemas de rendimiento del motor causados por un regulador defectuoso, que podrían provocar un aumento de las emisiones. Por lo general, el dispositivo reconocerá estos problemas, encenderá la luz de verificación del motor y almacenará un código de problema de diagnóstico (DTC) correspondiente en su memoria.
3. Humo negro del tubo de escape
Un regulador de presión de gasolina defectuoso puede provocar que el motor funcione rico (de como resultado mezclas ricas). En casos extremos, esta condición puede hacer que el vehículo emita humo negro por el tubo de escape.
4. Combustible en la línea de vacío del regulador
Cuando un regulador sufre de un diafragma roto, es probable que encuentre combustible en la línea que conecta el dispositivo al vacío del motor.
5. Bujías descoloridas
Las bujías del vehículo pueden tener color de hollín. Retira una bujía y observa la punta. Si se ha oscurecido, el regulador de presión de gasolina podría estar defectuoso.
6. Perdida de combustible
Es posible que observes gotear combustible del conducto de escape del auto. Un regulador de presión que funcione mal puede causar dicha fuga si deja pasar demasiado combustible a los cilindros.
¿Dónde se ubica el regulador de presión de gasolina?
En autos más antiguos con inyección de combustible multipuerto y un sistema de combustible continuo, el regulador suele montarse en el riel de combustible.
También se tienen aplicaciones más antiguas que cuentan con inyección de cuerpo de aceleración (TBI) o inyección de puerto central (CPI). Con TBI, el regulador se encuentra integrado en el conjunto de medición de combustible dentro del cuerpo del acelerador. Los vehículos con CPI tienen el regulador ubicado en el conjunto del inyector.
En cambio, y como mencionamos anteriormente, la mayoría de los autos más nuevos tienen un sistema de combustible sin retorno y, por lo tanto, no tienen un regulador de presión externo. Como resultado, la mayoría de los sistemas sin retorno emplean un módulo de control para administrar la velocidad de la bomba de combustible, manteniendo la presión de combustible deseada. También está el caso de algunos diseños que usan un regulador de presión en el tanque que está integrado en la bomba de combustible.
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Fuente: Carparts, Elecktrofe
