Fallas comunes y el escándalo «PowerShift» del Ford Fiesta (2011-2017)

Cuando el Ford Fiesta de nueva generación pisó México en 2011, fue un flechazo. De repente, teníamos un subcompacto que se sentía de categoría superior, casi un «mini-premium». Venía con siete bolsas de aire (en las versiones más equipadas), un diseño europeo súper audaz, materiales interiores que no se sentían «de plástico barato» y, lo mejor de todo, se portaba de maravilla en carretera. Hizo que rivales directos como el Yaris o el Fit parecieran reliquias.

Se vendió como pan caliente, de verdad. Pero ojo, porque detrás de esa fachada tan atractiva y ese manejo tan divertido, se escondía un verdadero problema mecánico que terminó costándole a Ford litigios millonarios a nivel global y un sinfín de frustraciones a sus dueños: La famosa transmisión PowerShift.

Si te has puesto a buscar uno y estás pensando en comprarlo porque «está a buen precio y se ve genial», ¡te pido que hagas una pausa y leas esto con calma! Podría ser la clave para que termines con un coche fantástico… o que te metas de lleno en una pesadilla de reparaciones.

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Para entender bien esto, nos fuimos directo a la fuente y hablamos con Jorge Soto, nuestro especialista de cabecera. Jorge es el que ha visto llegar estos Fiestas en grúa una y otra vez. Él conoce de primera mano la diferencia abismal que existe entre la versión manual y la automática, y te aseguro que su consejo es el más valioso que vas a escuchar hoy.

El Escándalo: ¿Qué es la caja PowerShift y por qué falla?

Mira, el tema con el Fiesta (y también con el Focus de esa época) es que no llevan una caja automática común y corriente. Ford decidió ponerles una transmisión llamada DPS6 PowerShift. Técnicamente hablando, es una «caja manual robotizada de doble embrague seco». La teoría era brillante: querían darnos la misma eficiencia de combustible que tiene un coche estándar, ¡pero con la comodidad de un automático!

El problema es que la práctica fue un desastre. La verdad es que la caja venía con fallos de diseño de fábrica. Los sellos internos se dañaban, el embrague se contaminaba con aceite o se gastaba rapidísimo, y el módulo de control electrónico terminaba quemándose por el exceso de calor.

Las 4 Fallas Graves del Ford Fiesta (2011-2017)

1. Transmisión PowerShift: El «Temblores»

Esta es la falla número uno. Si el coche que estás viendo es automático, prepárate, porque es casi un hecho que este problema le va a tocar.

• El Síntoma es inconfundible: Vas saliendo de un semáforo, quitas el pie del freno y aceleras con calma. De pronto, el coche empieza a temblar violentamente; es esa misma sensación horrible de cuando un conductor principiante suelta mal el clutch en un manual. Además, puede que escuches ruidos metálicos muy molestos («grinding») justo cuando está haciendo el cambio de velocidad.
• ¿La Causa? Desgaste prematuro de esos dichosos embragues secos o, peor aún, contaminación porque los retenes están fugando aceite.
• ¿La Solución? Ford en su momento tuvo que extender las garantías por las demandas, pero, seamos honestos, para la mayoría de los coches de hoy, esa garantía ya venció. Arreglarlo te va a salir en un ojo de la cara, entre $20,000 y $35,000 pesos, y lo más frustrante de todo: va a volver a fallar porque el diseño de la caja, sencillamente, no cambió.

2. Muerte del Módulo TCM (El Cerebro)

• El Síntoma (y este es más serio): Vas en carretera o en la ciudad, y de la nada, el coche pierde potencia por completo, se queda como en neutral o simplemente no quiere encender. En el tablero, el mensaje es claro y aterrador: «Transmisión Avariada Servicio Inmediato».
• ¿La Causa? Estamos hablando del Módulo de Control de la Transmisión (TCM), que es una pequeña computadora que va montada justo en la caja. El problema es que se calienta a tal grado que los circuitos internos se terminan friendo.
• ¿La Solución? Toca cambiar el TCM. El gran pero es que a veces las agencias los tienen agotados (en backorder), y te toca esperar y tener tu coche parado durante meses hasta que les llegue la pieza.

3. Sistema de Enfriamiento (Fugas y Sobrecalentamiento)

El motor 1.6L en sí es bastante confiable, pero aquí viene el «pero»: los accesorios periféricos que lo rodean son de un plástico bastante malo.

• El Síntoma: Empiezas a notar que el nivel de anticongelante baja sin razón aparente o el coche se calienta demasiado cuando estás atascado en el tráfico.
• ¿La Causa? El depósito de recuperación (ese «riñón» donde viertes el líquido) se agrieta por el calor constante. Además, la carcasa donde va el termostato también es un punto débil y suele romperse.
• La Solución: Afortunadamente, cambiar el depósito y el termostato no es caro ni complicado. Pero ojo, es una reparación que debes hacer sí o sí, porque si lo dejas pasar y el coche se sobrecalienta, corres el riesgo de fundir el motor por completo.

4. Chapas de las Puertas (Recall Masivo)

¡Este sí que fue un escándalo de seguridad!

• El Síntoma: Intentas cerrar la puerta y simplemente rebota. O lo que es todavía peor: vas conduciendo tranquilamente y, de repente, la puerta se abre sola.
• ¿La Causa? Había un pequeño resorte interno en la cerradura (latch) que se rompía por fatiga, especialmente en climas muy cálidos como los que tenemos en México.
• La Solución (y aquí está tu salvación): Ford se vio obligado a emitir un llamado a revisión (Recall) gratuito por este fallo. Por eso, el consejo clave es: verifica con el número de serie (VIN) del coche que te interesa si ya le instalaron las chapas de seguridad nuevas.

Guía de Compra: ¿Cómo salvarte de la estafa?

La Regla Clave (El Pedal):

• Asómate al piso del conductor. ¿Ves tres pedales (incluido el clutch)?

  • SÍ: ¡Felicidades! Tienes un excelente candidato. Revisa los puntos básicos (fugas, motor, papeles) y procede con la compra.

  • NO (Es Automático): Detén la compra aquí mismo. A menos que de verdad disfrutes la sensación de tirar tu dinero.

Prueba de Manejo (Solo Si Eres Necio con el Automático):

• Si eres muy terco y aun así quieres el automático, la prueba debe ser dura: manéjalo en tráfico denso por al menos 30 minutos. El famoso «temblor» de la transmisión aparece justo cuando la caja agarra temperatura. Si al arrancar notas que vibra hasta el tablero, esa PowerShift ya dio lo que tenía que dar.

El Detalle Tecnológico (El Sistema Sync/Bluetooth):

• Prueba a conectar tu celular. El sistema «Sync» (el bluetooth) de Microsoft que usaban en esos años es conocido por fallar y, literalmente, quemarse. Si no logras que conecte, tendrás que cambiar ese módulo, lo que te costará unos $3,000 pesos extra.

Conclusión

El Ford Fiesta de esta generación (2011-2017) es la viva historia de «La Bella y la Bestia» concentrada en un solo coche:

• Versión Manual: Es una joya infravalorada. Un coche seguro, divertido de manejar y muy fiable. Una compra totalmente inteligente, ideal para la ciudad, estudiantes o para salir a carretera sin preocupaciones.

• Versión Automática (PowerShift): Es, sin más, un grave error de ingeniería que Ford jamás logró solucionar por completo.

¡No permitas que su diseño atractivo te engañe! En el caso específico de este auto, la transmisión es el factor que define si tu experiencia será la de un dueño feliz y satisfecho o la de un cliente frecuente de tu servicio de grúas.

Redacción por Gossipvehículos