Land Rover, una reconocida marca de vehículos todoterreno, ha emitido un retiro del mercado para su modelo Range Rover 2023 y 2300 unidades más antiguas debido a un riesgo potencial de incendio. La empresa ha tomado esta medida preventiva para garantizar la seguridad de sus clientes y evitar cualquier posible incidente. En este artículo, se explorará con más detalle la situación y las medidas que la marca está tomando para abordar el problema.
La marca de vehículos toma medidas preventivas para garantizar la seguridad de sus clientes
Land Rover ha emitido un retiro del mercado para un total de 2301 unidades de Range Rover en dos acciones diferentes debido al riesgo potencial de incendio. La acción más grande incluye 1037 modelos híbridos enchufables de 2018 a 2021 y otros 1263 modelos Range Rover Sport de 2018 a 2022.
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Estos vehículos comparten el mismo motor híbrido de gasolina de 4 cilindros y se centran en una correa de transmisión de la bomba de agua que, si se daña, puede provocar un sobrecalentamiento del motor y una fuga de refrigerante.
El segundo retiro del mercado se centra en un solo modelo Range Rover 2023 y se enfoca en la falta de una junta que podría permitir que el aceite caliente provoque un incendio. La seguridad de los clientes es la máxima prioridad para Land Rover, y la empresa está tomando medidas para abordar estos problemas lo antes posible.
El retiro del mercado de Land Rover se debe al riesgo potencial de incendio en los modelos de Range Rover. Si el motor se sobrecalienta, es posible que el tubo del codo de refrigerante del motor tenga fugas, lo que podría derramar refrigerante sobre el escudo térmico del turbocompresor y provocar un incendio. Para abordar este problema, el fabricante está reemplazando el codo de refrigerante y la tubería de refrigerante de alimentación del turbocompresor por otros nuevos.
El modelo Range Rover 2023, que también se está retirando del mercado, tiene una falta de junta en el tubo de drenaje de aceite del turbocompresor. La fuga de aceite de ese lugar podría terminar en el colector de escape y provocar un incendio propio. Aunque solo uno de los cinco motores que carecían de esta junta llegó a manos de un cliente en EE. UU., Land Rover está tomando medidas preventivas para garantizar la seguridad de sus clientes.
La compañía informa que no tiene conocimiento de ningún accidente, lesión o incendio relacionado con estos dos problemas, y alienta a los propietarios a comunicarse con la NHTSA al 1-888-327-4236 o llamar a su concesionario local para confirmar si su vehículo está afectado. La seguridad de los clientes sigue siendo la máxima prioridad para Land Rover, y la empresa está trabajando para solucionar estos problemas lo antes posible.
Redacción por Gossipvehículos/Fuente: www.carscoops.com