Acostumbrados a asociar a Audi con su emblemático sistema de tracción integral Quattro, resulta sorprendente descubrir que la versión básica del nuevo sedán eléctrico cuenta únicamente con tracción trasera.
Un viaje al pasado
Para entender esta decisión, debemos remontarnos a los orígenes de Audi. Fundada a principios del siglo XX y fusionada con otras marcas alemanas para formar Auto Union, Audi adoptó un diseño de tracción delantera heredado de modelos anteriores como el DKW F9. Este esquema se mantuvo durante décadas, incluso después de la Segunda Guerra Mundial, y ha sido la base de la mayoría de los modelos Audi hasta la fecha, incluyendo al A6 y sus predecesores.
La excepción que confirma la regla
El sistema Quattro, que ha sido sinónimo de Audi durante décadas, es en realidad una evolución de este diseño básico, añadiendo un eje de transmisión a las ruedas traseras para ofrecer una mayor tracción y estabilidad. Sin embargo, la tracción trasera pura y simple ha sido una excepción en la historia moderna de Audi, limitándose a modelos deportivos como el R8 y algunos SUV más básicos.
La era eléctrica y un nuevo paradigma
Con la llegada de los vehículos eléctricos, el panorama cambia por completo. La arquitectura de estos vehículos permite una mayor flexibilidad en la distribución del peso y la potencia, haciendo que la tracción trasera sea una opción más atractiva. Además, muchos de los competidores del A6 e-tron, como el Tesla Model S o el BMW i5, también ofrecen versiones de tracción trasera en sus modelos básicos.
¿Por qué es importante?
Aunque esta ruptura con la tradición puede parecer menor, es un hecho destacable que merece ser mencionado. La tracción trasera ofrece ventajas como una conducción más ágil y una dirección más precisa, lo que podría convertir al A6 e-tron básico en una opción muy atractiva para aquellos conductores que buscan un sedán eléctrico con un comportamiento dinámico más deportivo.
El Audi A6 e-tron representa un punto de inflexión en la historia de la marca. La decisión de ofrecer una versión de tracción trasera en un modelo tan emblemático como el A6 es un claro ejemplo de cómo la electrificación está transformando la industria del automóvil y desafiando las convenciones establecidas. Aunque la tracción Quattro seguirá siendo un elemento diferenciador de Audi, la llegada de modelos como el A6 e-tron demuestra que la marca está dispuesta a explorar nuevas vías y ofrecer a sus clientes una gama de productos cada vez más diversa y adaptada a las nuevas demandas del mercado.
Redacción GossipVehículo con fuente motor1.com
