Los avances en tecnología han transformado radicalmente la seguridad automotriz. Los vehículos modernos están equipados con sensores y software sofisticados que les permiten percibir el entorno que los rodea, incluyendo marcas viales, señales de tráfico, otros vehículos y peatones. En un nuevo paso hacia la seguridad vial, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA) ha establecido una regla que exige la incorporación del frenado automático de emergencia con estándares más estrictos en todos los vehículos nuevos a partir del 2029.
Impacto de la Nueva Regla
Esta nueva regulación busca salvar vidas y prevenir lesiones en las carreteras. La NHTSA estima que la implementación de estas tecnologías podría evitar hasta 360 muertes anuales y 24.000 lesiones. La regla exige que todos los vehículos ligeros nuevos vendidos en Estados Unidos a partir del 2029 cuenten con tres sistemas de seguridad:
- Advertencia de colisión frontal: Esta tecnología alerta al conductor del riesgo inminente de una colisión frontal.
- Frenado automático de emergencia: En caso de que el conductor no reaccione a la advertencia, el sistema activa automáticamente los frenos para evitar o mitigar la colisión.
- Frenado automático de emergencia para peatones: Detecta la presencia de peatones en la trayectoria del vehículo y activa los frenos para evitar atropellos.
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Compromiso de la Industria Automotriz
Afortunadamente, la industria automotriz ya se encuentra en camino de ofrecer estas características de seguridad como equipamiento estándar. En 2023, 20 fabricantes de automóviles se comprometieron con el Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras (IIHS) a equipar más del 95% de sus vehículos producidos en Estados Unidos con frenado automático de emergencia. De igual manera, Consumer Reports anunció en 2019 que los vehículos que aspiren a su premio Top Picks deberían ofrecer frenado automático de emergencia para peatones.
Detalles de la Regulación
La nueva normativa federal no solo exige la implementación de estas tecnologías, sino que también establece parámetros específicos para su funcionamiento:
- Capacidad de frenado a altas velocidades: Los sistemas deben ser capaces de detener el vehículo a velocidades de hasta 62 mph para evitar choques con otros vehículos.
- Detección de peatones en todo tipo de condiciones: El sistema debe detectar peatones tanto durante el día como en la noche.
- Activación de frenado en situaciones críticas: El sistema debe activar los frenos automáticamente a velocidades de hasta 90 mph cuando detecte una colisión inminente con otro vehículo, y a velocidades de hasta 45 mph en caso de riesgo de atropellar a un peatón.
La implementación del frenado automático de emergencia como tecnología obligatoria en todos los vehículos nuevos representa un avance significativo en la seguridad vial. Esta medida, en conjunto con el compromiso de la industria automotriz y las iniciativas de organizaciones como el IIHS y Consumer Reports, contribuirá a reducir drásticamente el número de accidentes y sus consecuencias fatales en las carreteras.
Redacción GossipVehículo con fuente motor1.com