La problemática que atravesaban los transportistas finalmente ha reducido su intensidad tras la limitación del precio del combustible por el descuento de 20 céntimos del Gobierno, además de que la petición de que sus servicios no puedan ser contratados por debajo de los costes de explotación ha sido atendida.
A pesar de todo ello, trabajadores de dicho sector continúan teniendo otro posible problema, y es que cada día se enfrentan a multas que pueden llegar hasta los 18.000 euros. En el caso de los conductores autónomos la multa es doble para los que conducen el coche y son propietarios, pues la amenaza bajo sus hombros implica sanciones por el incumplimiento de la ordenanza de transportes por carretera o por infringir la Ley de Tráfico.
Si trata de infracciones leves, los importes van desde los 100 y los 400 euros, pero las más graves son clasificadas en dos grupos. El primero comprende multas de 1.001 a 2.000 euros y el segundo entre 2.001 y 4.000 euros. Para las demás infracciones, el importe será de 6.001 a 18.000 euros si el implicado ya había sido procesado por alguno de esos motivos en los últimos 12 meses.
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Entre las conductas más castigadas se encuentra el hecho de no llevar tacógrafo, prestar servicios sin tener el título habilitante, exceder tiempos al volante, incumplir tiempos de descanso y ciertos excesos de carga. Varias infracciones son sancionadas con la Perdida de Honorabilidad, lo que indica la inhabilitación temporal como transportista.
Ante todo esto, Dvuelta, la empresa defensora de los automovilistas, analizó a profundidad sobre las sanciones más comunes y encontraron que superar el tiempo de conducción y el exceso de carga son las más frecuentes, con un 53% de los casos. Si se aplica más de una sanción grave, pues si bien existe un descuento por pronto pago, es inferior al que estipula la normativa de Tráfico, siendo un 30% y no del 50%.
Dvuelta ha pedido medidas urgentes para flexibilizar lo que supone en términos económicos la aplicación de dichas multas. Para ello, propusieron la conversión de los pagos en créditos ICO o establecer moratorias y fraccionamientos por parte de las distintas Administraciones.
Lo cierto es que las medidas para controlar y multar no están porque sí. Más bien, se justifican alegando las tantas características de los camiones y la gran responsabilidad que conlleva el transporte de personas o tipos de mercancías.
La DGT aprovechó para recordar que los camiones y autocares tienen un peso de gran importancia en la Seguridad Vial, siendo el segundo tipo de vehículo más cuantioso solo detrás de los turismos. Sumado a esto, en 2020 los vehículos de transporte representaron el 13% de accidentes que incluyeron víctimas.
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Redacción por Gossip Vehículo y fuente Marca.
